La calle Monteleón en 1960. Para muchos practicamente irreconocible esta zona de la ciudad. "Desembarcamos" en esta calle en el año 1968 cuando ya estaba construido el edificio llamado "Monteleón", veníamos de la calle San Sebastián y de vivir en un bajo muy pequeño y aunque eramos muchos, mis dos abuelos, mi madre, una tía y tres hermanos, el piso nuevo me parecía el no va más. Era un edificio con dos escaleras y nosotros víviamos en un entresuelo. Allí pasé la etapa final de mi niñez jugando con Kiko, Alfonso, Eloy, Caridad, Pitusa, María Elena y Rafa, mi hermano pequeño, que eran los niños del edificio. Nos juntábamos con los del la Rúa Nova de Abaixo, los hermanos Sanmartín y los hermanos Couto, Monchiño Pintos y su hermana, que eran vecinos en la calle, los hermanos Lorenzo, Jose Manuel y Francis y Tony, también el "acoplado" de la calle Rua Nova de Arriba, Paqui Montes, si no me olvido de nadie, esta era la rapazada del barrio. No teníamos "blackberrys", ni "wiis", ni "play estations", ni "internet" en casa, jugábamos al "quedas" en vez de chatear, al "escondite", a la "comba", al "burro", al "peletre", a los "cromos", a "polis y cacos", a las "bolas", a las "chapas" y a los "trompos". Nos pasábamos todo el día en la calle, cuando anochecía nadie nos llamaba por el móvil sino que nos gritaban desde la ventana. Si nos portábamos mal no nos llevaban al psicólogo sino que nos daban una buena "somanta". Jugábamos con tierra y de vez en cuando teníamos piojos y lombrices, bebíamos agua del grifo y también de mangueras, andábamos en bicicleta sin cascos, ni guantes, ni rodilleras. Teníamos clases mañana y tarde y comíamos en casa. Devorábamos todos los dulces que podíamos y sí, sí, con azúcar. En el colegio había buenos y malos estudiantes, y unos pasaban y otros no, y no se creaba ningún tipo de trauma... tiempos aquellos, tiempos felices los de la niñez, por lo menos para mí.
Los edificios se elevaron en altura, pero la calle no se hizo más ancha...
ResponderEliminar